Desde hace algunos años, se habla mucho del concepto de Nocode en los medios de comunicación y en el mundo de la tecnología. Sin embargo, si atendemos a su definición, Nocode apareció en los años 80 y su uso se ha democratizado realmente a partir de 2003 -con la creación de Wordpress-.
Entonces, ¿por qué el fenómeno Nocode parece tan reciente y no hizo más ruido hace una década?
Wordpress ha lanzado efectivamente el tema, pero su posicionamiento sólo cubre una parte de los casos de uso técnico a los que se enfrentan las empresas tecnológicas: el de construir páginas estáticas, una página de escaparate, un blog, etc.
Sólo en los últimos años las herramientas han madurado lo suficiente como para permitir a la gente hacer realidad sus ideas y construir sus propias aplicaciones. La aparición de la nube y APIS s han fomentado claramente el desarrollo y la adopción de estas herramientas a gran escala.
Ante una escasez cada vez mayor de desarrolladoresNocode supone claramente un cambio de paradigma y ofrece ventajas innegables.
El concepto de Nocode se asocia a menudo con el de low-code. Y es cierto que no siempre es fácil entender el tema. A veces se encuentran herramientas que llevan ambas etiquetas.
Nocode, o más bien las herramientas Nocode, permiten a personas sin conocimientos técnicos crear todo tipo de aplicaciones y automatizaciones sin tener que escribir una línea de código.
Estas herramientas permiten a cualquiera transformar sus ideas en un producto digital y evitar destinar demasiados recursos económicos a perfiles técnicos, ya sean internos o externos a la empresa. No se requieren habilidades ni conocimientos de programación.
Aquí es donde se traza la línea entre Nocode y low-code.
Low-code es menos accesible que Nocode y no se dirige a los mismos usuarios finales. Estas herramientas interesarán más a los desarrolladores. Les permitirán ir mucho más rápido en su desarrollo al tiempo que tienen un mínimo de libertad para añadir capas de código y personalizar el proyecto de forma compleja.
Nocode, low-code y code son totalmente complementarios y no se dirigen a los mismos usuarios ni a las mismas tipologías de empresa.
Nocode es la más accesible y dará lugar a la aparición de una categoría de desarrolladores Nocode aficionados llamados "citizen makers" para permitir a cualquier propietario de proyecto empezar a trabajar reduciendo los costes de producción y el Time-to-Market. Muchos anglicismos... lo sabemos 👀.
Estas herramientas también atraen a los equipos empresariales de grupos ya bien estructurados para darles más autonomía y crear sus propias soluciones técnicas sin pasar por TI. Los procesos son más fluidos para todos y la empresa gana en agilidad.
Sin embargo, crear en Nocode es un trabajo que requiere ciertos conocimientos, tanto teóricos como prácticos : dominar las herramientas es una cosa, pero también se necesita una metodología y un enfoque de soluciones para desarrollar productos en Nocode (desde simples páginas de aterrizaje hasta herramientas de CRM o de rendimiento más elaboradas). Por ello, los Nocode Makers son perfiles cada vez más solicitados y para los que es imprescindible una formación profesional.
Son los Nocode Makers que permiten a las pymes o a los equipos de grandes grupos acelerar sutransformación digital e independizarse de los ingenieros dedicados a proyectos de mayor envergadura con desarrollo personalizado en código.
Low-code atraerá a los desarrolladores experimentados o limitados por las funciones de Nocode que deseen acelerar y desarrollar proyectos relativamente jóvenes y en fase de construcción.
El código será esencial para desarrollar una funcionalidad empresarial muy específica o una situación novedosa, lo que a veces resulta imprescindible cuando el proyecto ha alcanzado cierto grado de madurez.
Aquí encontraremos herramientas como Zapier, Integromat o n8n - que nos permiten crear flujos de trabajo compuestos por disparadores y acciones.
Se trata de herramientas muy potentes que están al alcance de todos en función del nivel de complejidad del flujo de trabajo.
Puede imaginarse enviar una notificación en Slack y un correo electrónico cuando alguien rellena un formulario en un sitio web. O automatizar la creación y el envío de una factura a un cliente cuando se compra un producto en su sitio de comercio electrónico.
En la actualidad son herramientas esenciales en las organizaciones para automatizar al máximo los procesos y situar el elemento humano donde realmente tiene valor.
Webflow, Softr, Stacker, Dorik, Carrd... sólo por nombrar algunas. Todas ellas son herramientas que permiten crear sitios web, páginas de aterrizaje o blogs con relativa rapidez. Además, el manejo es bastante sencillo y rápido.
Esta vez más complejas, estas herramientas se dirigen a usuarios más experimentados y con buenos conocimientos técnicos, sobre todo en lógica de bases de datos. Son tus aliadas perfectas para crear productos complejos con áreas de cliente y de administrador, por ejemplo. También se utilizan mucho para crear sistemas ERP, es decir, aplicaciones internas de una empresa.
Bubble y Power Apps son dos ejemplos de herramientas de programación visual.
Hemos visto que Nocode ha empezado a democratizarse con la necesidad de crear sitios de escaparate y blogs. Este es uno de los doce casos de uso que hemos identificado en Alegría.
Hasta la fecha, nuestro equipo domina más de 120 herramientas principales de Nocode y hemos identificado más de 600 en nuestro conjunto de herramientas disponibles. 🚀
Tanto si trabajas en una start-up, una PYME, una gran empresa o eres un ciudadano maker, Nocode se ha convertido en algo esencial para crear, innovar y probar ideas rápidamente a un coste muy inferior al que supondría hacerlo en código.
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